La salud emocional es una parte de la salud general y nos permite enfrentar los diferentes desafíos de la vida, recuperarnos de los contratiempos, vivir mejor con nosotros mismos y estar mejor con los demás.
Además, que la salud emocional nos permite trabajar de forma productiva, tomar mejores decisiones y lidiar con el estrés de la vida cotidiana.
Te compartimos algunas recomendaciones para trabajar en tu salud emocional.
Ser agradecidos. Practicar la gratitud por las cosas buenas de la vida, hacer una lista de agradecimientos antes de dormir te brindara una experiencia positiva y te ayudara a ver tu vida de forma diferente.
Hacer ejercicio. Realizar alguna actividad física regularmente reducirá la sensación de estrés, depresión y mejorará el estado de ánimo.
Conectarse con los demás. Pasar un tiempo con nuestros familiares y amigos, buscar algún voluntariado o unirse algún pasatiempo que disfrute, genera un buen apoyo para protegerse contra los daños del estrés y tendrá la oportunidad de crear relaciones fuertes y saludables.
Mantener una actitud positiva. En diferentes circunstancias parecerá difícil mantener una actitud positiva, pero enfocarnos en las cosas buenas de la vida ayuda a mantener el equilibrio.
Ejercicios de respiración. Practicar y concentrarse en una respiración lenta, profunda y relajada producirá una respuesta de relajación natural del cuerpo.
Es importante reconocer cuando se necesita ayuda y acudir con un profesional de la salud.